A través de la implementación de este programa brindaremos atención a las víctimas
de hechos delictivos (tales como robos violentos, entraderas, homicidios, intentos de homicidio, suicidio e intentos de suicidios) atendiendo a las particularidades de cada caso.
El fin del mismo es consolidar una red eficaz que brinde respuestas rápidas y adecuadas a las particularidades de cada víctima, a partir de un enfoque interdisciplinario,
interinstitucional y basado en los derechos humanos.
Las víctimas de hechos delictivos necesitan ser acompañadas y asistidas desde el
Estado. En este sentido, resulta primordial el trabajo articulado e interagencial para que al
tomar contacto con las mismas se desplieguen a su favor una serie de recursos que permitan sobrellevar el momento lo mejor posible.
El sistema de intervención debe evitar la revictimización de la persona y colaborar
en el proceso que transita como consecuencia del hecho. Asimismo, debemos asesorar
y acompañar a las víctimas que así lo requieran durante la primera etapa del proceso penal, a los efectos de garantizar su derecho efectivo al acceso a la justicia. Por otro lado,
coordinaremos acciones de apoyo terapéutico, sanitario y social, y de acompañamiento
para la gestión de distintos trámites de documentación personal -tales como licencias de
conducir, DNI, etc. Por último, se implementará un protocolo de actuación unificado entre
las áreas competentes para llevar adelante esta intervención de manera homogénea y
eficiente.